A veces las pequeñas reconciliaciones son mas que detalles simples.
Tenemos lo que buscamos sin pedirlo, y logramos reconfortarnos con eso.
Tengo grabadas aquellas palabras que cambiaron dramáticamente la dirección de mi vida en dos ocasiones.
Primero fue con el que me mostró que el mundo tenia mas colores de los que yo pensaba. El que me enseño que el arco iris siempre tiene un final inesperado. Y que no habían barreras para el sentimiento cuando este era verdadero. Ya de tu partida son 5 años. Aprender a vivir con el dolor de tu ausencia fue difícil. Eramos inseparables, pero aun seguimos siendo inquebrantables. Cada día que aprendo algo nuevo lo sigo compartiendo contigo como en aquellos años. Y sigo con la esperanza de volver a recorrer los lugares mas bellos que pude conocer tomada de tu mano. Este año cumpliríamos 9 años tomados de la mano recorriendo senderos inciertos, y puedo decir que tu y solo tu me diste los 3 años 9 meses mas hermosos de mi corta vida.
Luego fue con aquel que me dio la vida, aquel que siempre me amó incondicionalmente desde que llegue a su vida. Aquel que me enseño a hablar, caminar, comer, aquel que me dio la oportunidad de ser feliz y de respirar los acontecimientos de la vida sentada en sus piernas como una pequeña cachorra.  Y de tu partida recién va a ser un año, faltan dos días para que se cumpla el año y aun estoy con ese luto enterrado en mi corazón. Es de esos dolores que son únicos, de esos que debes aprender a vivirlos con mucho apoyo y tiempo. Pero de esos que calan mas que hondo y no cicatrizan jamas. Padre mio, te amé, te amo y siempre, siempre te amaré. Aunque tenga que esperar una eternidad para volver a besarte y abrazarte os juro por tu nombre que la esperaré. Paciente y tranquila, por saber que donde quiera que estés me cuidas y proteges como solo tu pudiste hacerlo. Eres el hombre de mi vida, el hombre ideal, el príncipe azul que toda mujer desea tener, solo por el hecho de amarme como nadie lo hará jamas, solo por el hecho de ser " mi padre". 
Aniversario 1º. 

Caminamos vagamente por las costas de la bahía. El cielo era claro y despejado, y el mar estaba tan tranquilo como el palpitar de nuestros corazones. Decidimos tomarnos la mano sin miedo a lo que pudiesen decir las personas de nuestro alrededor porque no conocíamos a nadie y todos sólo pensarían que eras mi pareja. Mi hombre, mi amor, mi compañero de vida y de aventuras. Lo cierto era que ese compañero de vida y aventuras era el más leal y atento que podía existir, era preocupado y cariñoso, el problema era yo. Decidimos caminar en la orilla del mar a pies descalzos. Sin decir palabras podíamos comunicarnos , sólo bastaban las miradas. Esas cómplices , aquellas que guardaban nuestros secretos, nuestros anhelos. Nuestros sueños.
Solos frente al mar, solos frente al mar tomados de la mano, solos frente al mar tomados de la mano dándonos un cálido beso.
Atentos , siempre atentos. Mirando y examinando. Recorriendo cara mirada que caía sobre nosotros para no encontrar conocidas. A ratos convertir la situación en un obstinado juego al que siempre sólo yo quería ganar. Y recibir mi cariñosa paga nocturna. Llena de besos, caricias, y locuras. Cuidándonos siempre de todo.
Cuidando la calidad amarga que siempre nos unía, esa calidad poco valorada, poco seria, esa calidad sin tiempo sin espacio y sin ataduras. Esa calidad que sólo tu podías darme y entender . Calidad : De Amante.