En algún momento de mi vida recordé haber escrito una pequeña pero sutil frase... " Quiero una estabilidad emocional que alguna vez llegue a ser permanente!" 
Hoy, puedo decir que la encontré. 
Y es que encontrar las cosas no es fácil, y es en ese momento cuando uno decide si tener que perder cosas por encontrar unas nuevas. 
En el proceso,  me encontré a mi misma como ser humano libre de sentimiento & te encontré a ti, mi complemento perfecto. 
Vemos mas allá del horizonte y nos sentimos mas vivos en cada segundo. Solo eso es lo que importa y lo demás... sigue su curso. 
Yo te encontré a ti y eso, ahora, es el mayor motivo de felicidad. Somos lo que alguna vez quisimos ser, incluso sin conocernos. 
teamo!  JoseLuis.-

Te extraño, Kittie

" En algún momento tu y yo fuimos felices. Así fue el comienzo de la historia mas triste de mi vida. De la única historia que viví en realidad. Tortuosa, nefasta, sangrienta.
Te miraba caminar por los alrededores del jardín mientras me hablabas de los encuentros y desencuentros vividos, experiencias vanas, sin sentidos. Molestias y malos recuerdos como les llamabas tú. Pasado como le llamé yo alguna vez. << No te pongas triste, haz sido la única que ha llenado mi corazón con amor >>  Creí alguna vez que sabia el significado de tan valerosa palabra...
<< Sonríe cariño, nada mas importa si estamos juntos para siempre >> ; << Nadie te va a querer como yo lo hago y eso o sabes bien >>.
Me aferre a tus engaños, a tus locuras, a tus lujurias. A tu forma de amar. Nadie habría imaginado jamás amar como yo lo hice.
Estaba segura de que éramos felices.
<< Debo decirte algo mujer, me he enamorado de otra. Si, como lo oyes, me he enamorado >>
Abandone mi vida por ti, abandone mis sueños por ti , abandone mis ilusiones por ti. Abandone cualquier cosa conocida  por ti. Me dispuse ante tu presencia para complacer tu ego. Te has enamorado de otra. ¿Otra que estará dispuesta a abandonar todo también?
Me sumergí a lo mas profundo de la desesperación vulgar. Entristecida por los sueños de alguna vez creados, hoy lastimas, dañados, desechados.
Sola, sola en el inmenso jardín sin flores. Hoy sola, veo crecer los árboles marchitos y las luces ya no tan radiantes del atardecer me llaman a pernoctar en un profundo sueño sin sentido.
Ya no siento, ya no como, ya no bebo, ya no duermo... ya no vivo.
Aquella habitación vacía y fría es mi hogar.
Las paredes blancas, radiantes y limpias son el océano perfecto para mis pensamientos y los amarres metálicos de mis muñecas son el cordón que me mantiene atada a la tierra.
<< Me he equivocado y necesito tu perdón. ¿Qué te he hecho? ¡dios mio! ¿Cómo pudo suceder esto? >>
Estoy perdida y ya no adquiero reacción. Te escucho llorar, y me duele. Sí, me duele... Siento tu mano tomar la mía y acariciarla. Siento tus labios sobre mis dedos y como tus lagrimas se derraman por ellos. Quiero mirarte, Lo intento. Te veo.
No se quién eres.
Quiero conocerte, De verdad. Te aprieto la mano.
No tengo sentimientos. Me desespero y la expresión de mi rostro comienza a cambiar.
Siento algo, unas palpitaciones en el pecho. Estoy viva. Quiero moverme y desatar mis muñecas. Creo que puedo estarlo, ¡Creo que puedo volver a vivir!.
Siento una presión alarmante en una de mis extremidades y un escalofriante liquido atraviesa mis venas y me calma. Vuelvo a mi nuevo estado de naturaleza, Acomodan mi cuerpo y vuelvo a sumergirme en aquella pared blanca, aquel océano que ha hecho de la habitación banca mi hogar.
Quieta, inmóvil. Con la mirada perdida derramo una lagrima y un Adiós insostenible.... inevitable.